Criterio de la intensidad máxima admisible o de calentamiento
El criterio de la intensidad máxima admisible o de calentamiento se refiere a la cantidad máxima de corriente eléctrica que un conductor o un dispositivo eléctrico puede soportar sin sobrecalentarse. Este criterio es importante para garantizar la seguridad y el funcionamiento adecuado de los componentes eléctricos, evitando posibles daños por sobrecalentamiento.
La intensidad máxima admisible se determina teniendo en cuenta diversos factores, como la capacidad de disipación de calor del material del conductor, la sección transversal del cable, la temperatura ambiente, la presencia de otros conductores cercanos que puedan generar calor adicional, entre otros.
Es importante cumplir con las especificaciones de intensidad máxima admisible establecidas por los fabricantes de los componentes eléctricos y seguir las normativas y estándares de seguridad eléctrica para evitar riesgos de sobrecalentamiento, cortocircuitos y posibles incendios.