Mínima variabilidad genética y máxima variabilidad fenotípica
La combinación de una mínima variabilidad genética y una máxima variabilidad fenotípica puede ocurrir en situaciones donde los individuos tienen un conjunto limitado de genes, pero estos genes se expresan de manera muy diversa debido a factores ambientales o epigenéticos.
Por ejemplo, en una población de plantas que comparten un conjunto reducido de genes pero que crecen en diferentes tipos de suelos, climas y condiciones de luz, podríamos observar una amplia variedad de características fenotípicas, como tamaño, forma, color de las hojas, etc. A pesar de tener una base genética similar, la variabilidad fenotípica sería alta debido a la influencia de factores ambientales en la expresión de los genes.
En resumen, la combinación de una mínima variabilidad genética y una máxima variabilidad fenotípica puede ser el resultado de la interacción compleja entre los genes y el ambiente en el desarrollo de los organismos.