Toxicidad como concentración máxima permisible
La toxicidad se refiere a la capacidad de una sustancia para causar daño a un organismo vivo. La concentración máxima permisible (CMP) es la cantidad máxima de una sustancia que se considera segura para la exposición de los seres humanos sin causar efectos adversos a la salud.
La toxicidad de una sustancia y su CMP pueden variar dependiendo de diversos factores, como la vía de exposición (por ejemplo, inhalación, ingestión, contacto dérmico), la duración de la exposición, la frecuencia de exposición y la sensibilidad individual.
Es importante tener en cuenta que la toxicidad de una sustancia y su CMP pueden ser determinadas por agencias reguladoras de salud y medio ambiente, como la Agencia de Protección Ambiental (EPA) en Estados Unidos o la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) en la Unión Europea. Estas agencias establecen límites de exposición seguros para proteger la salud humana y el medio ambiente.